Nadar.
Sumergirse en una pileta clorada a niveles insoportables, en un mar salado, en un río marrón camalote.
Dos brazadas, respiración, dos brazadas.
Hasta cansarse. Hasta sentir en la boca esa sequedad ácida.
Y después, si queda algo dentro, recién ahí.
Aunque no sirva para nada.
2 comments:
Ah, pero sí que sirve. Te lo aseguro!
Saludos :o)
Soltar todo el aire de golpe y después...
...respirar.
Post a Comment